Edición ciento tres

Vamos a poner de una vez otra edición pasada de la gacetilla, porque esta vaina la tenemos muy descuidada y porque está bien bueno poner cosas seguidas de vez en cuando. Ya saben entonces que después del 101 sigue el 102 y como esa fue la edición doble anterior pues ahora ponemos la edición 103.

Colaboraciones de Luto, de Wolfgang Guarín, de don Alirio, de Truchafrita, y textos de Tomás Gonzáles y Robert Crumb. Además, otras colaboraciones de Joni b, Camila Torre Notari y Maucho, que se habían quedado atrás en el homenaje anterior, en la edición de los nueve años.

¿Para qué seguir sacando una hoja de historietas gratis? Para que te llevés algo cabezón, sobre todo vos que no comprás nada.

¿Celebraremos los diez años de la gacetilla, que se cumplen este mes de febrero, con una fiesta? No, ya estamos cansados de regalar tantas maricadas y hacer eventos gratis donde todo el mundo goza menos uno. Celebre usted dentro de su cabecita drogada esta década caminando de para atrás.

Ahí va pues esta roña llamada robot (en su edición 103):

Nota: hay gente que todavía nos insulta por hacer esta vaina, llevan leyendo diez años la gacetilla y todavía escriben diciendo que es una mierda. Pueden tener razón pero si no les gusta no la lean más (eso aquí, y en Cafarnaúm, se llama masoquismo). 
Hasta la próxima amigos.

Edición ciento uno y ciento dos

En esta edición doble le pedimos a nuestros dibujantes colaboradores (en ese entonces, en nueve años de la gacetilla) que nos enviaran una dibujo, como pequeño homenaje a la gacetilla robot. Muchos respondieron al llamado y este fue el resultado: una gacetilla doble con dibujos de algunos de nuestros colaboradores. 

¿Es capaz de distinguir de quién es cada dibujo?

Ya está circulando una nueva edición (111-112)

Cuando el puto de Uribe esté muerto todavía seguirá circulando la hoja de robot. ¿Entonces quién va a hacer historia, político de mierda?

Claro, ya sabemos que la historia la escriben los ganadores. Uribe y su corte (y todos los dignos mandatarios de Locombia, en todo su miserable período "republicano") quedarán figurando, en letras de oro, en el gran libro de la Historia de Colombia. Pero, mientras tanto, sigue saliendo esa hoja humilde de robot, que no hará historia, que ya pocos leen, pero que es muy divertido hacerla.

Basta de estupideces, desde ayer viernes está circulando la edición doble de robot (111-112). Falla porque sólo sale en Medellín, chimba porque aún es gratis (y siempre lo será).