Después de la salida del libro de robot se editó esta gacetilla, la número 44, de cuatro páginas en donde Max presenta una tira y un cómic; una reseña sobre El olvido que seremos, la novela de Héctor Abad Faciolince, escrita por el atribulado y apedreado Periquito Azacán; una tira de Wil, un cómic de Joni y otro más de Truchafrita. Así que seguimos con robot doble y mucha carne.
10 comentarios:
ey¡ en argentina salio la version robot argentino...una porqueria al lado de la original, pero quien te dice a lo mejor...lo que si es que robot se expande por el mundo¡
Habrá que ver esa versión porteña de robot, imagino que Joni y Max la traerán para darle un vistazo. Y sí Ernan, estamos intentando que la gacetilla se disperse por el mundo, por lo menos ya a hecho algunas incursiones internacionales.
Y a propósito de la convocatoria para publicar fanzines; me desactualicé mucho o nunca se dio razón de ella? fracasó?
aupa robot
Gracias por preguntar, habíamos olvidado decirlo. El asunto es que para la convocatoria se presentaron dos propuestas (ambas de fuera de Colombia) y ambas, aunque significativas, no tenían, a nuestro criterio, un valor para ser publicables. Con tan precaria respuesta pues decidimos (de manera unánime) dejarnos de pendejadas y seguir publicándonos entre nosotros.
De todas formas sí hay que agradecer inmensamente a estas dos personas que mandaron sus propuestas y decirles que nada, que el hecho de que no fueran publicadas no quiere decir nada (es nuestro estúpido criterio), sigan dibujando que eso es lo significativo.
aaaaa,carajo,lastima ke no pueda seguir coleccionando sus pasquines,eso de verlos en pantalla me pone los ojos de escuadra...
guardenme un libro de robot,ke aguanta!
Luto, eso de guardar el libro de robot pues no hay necesidad porque ahí están los puntos de venta.
Robot, avísale a Truchafrita que he regresado de las inospitas tierras del sur, a ver como le hago llegar un kilo de fanzines.
corriguiendo la presentación de esta gacetlla #44: Malaleche no dibujó para este número
Ah, yo creí. Lo que pasa es que yo soy un robot y, en ocasiones, sufro de malfuncionamiento. Ahí me disculpás por atribuirle un cómic a tu hermano sabiendo que es tuyo.
Otra cosa: dejá de suprimir tus comentarios. Que el respetable público sepa que sos vos el que los suprime y no yo (¿acaso posteás borracho? No lo creo, vos sos un tipo bien juicioso, ¿cierto?). Bienvenido, nuevamente, a Locombia.
ah, pero robot! dejame autocensurarme que no permitirmelo sería como censurarme.
Sepa público lector que robot respeta el libre albedrío y soy yo el único responsable de mi inseguridad disfrazada de nihilismo.
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