viernes, 10 de julio de 2009

Edición sesenta y uno

A partir del número sesenta y uno de robot, de septiembre de 2008, la Alcaldía de Medellín paga la edición, gracias a que la gacetilla -junto con la serie de revistas de historietas Cuadernos Gran Jefe- ganó el año pasado una beca con la secretaria de cultura de la ciudad. Ese dinero ha permitido que la gacetilla doble su tiraje (de 1.000 a 2.000 ejemplares) y también que algunos digan "robot se vendió" (cosa que no sabemos por qué, pues la gacetilla siempre se ha regalado...).
En fin, en dos meses se acaba la ayuda de la Alcaldía y robot volverá a sus 1.000 ejemplares habituales y quizás, para algunos, también dejará de venderse (si es que les están viendo la cara de pelotudos y se las están vendiendo). Por el momento, mientras disfrutamos dos meses más por cuenta de los contribuyentes de la ciudad de Medellín, disfruten entonces esta edición sesenta y uno, la primera de un año de beca.



jueves, 2 de julio de 2009

Ya está circulando una nueva edición (69-70)

Por un montón de compromisos tardamos un poco más de lo acostumbrado, pero ya estamos nuevamente aquí. Después de casi dos meses de ausencia vuelve la gacetilla robot en papel, y para paliar un poco dicho abandono pues esta vez la gacetilla sale doble. Sí, la edición 69 y 70 juntas en una edición doble de robot (correspondientes a las ediciones de mayo y junio de este año).
En esta nueva edición doble, que ya está circulando desde ayer miércoles, damos la bienvenida a dos nuevos colaboradores: Mariana, quien debuta con una historieta y Boris Greiff, quien nos regala dos buenas ilustraciones. Además de estos nuevos dibujantes, hay colaboraciones de Otto Zaiser, desde Argentina; Tomás, con la continuación de su bella historieta Cecilia y Bartolo; Truchafrita, con un cómic muy bailarín; Friedrich Nietszche, que salió de su tumba para obsequiarnos un aparte de El Anticristo, y algunas cosas más.
Así que lo de siempre: usted vaya y busque la gacetilla doble de estos dos meses que no salimos, mientras nosotros nos preparamos para traerle la siguiente (y así hasta el infinito y más allá, es decir hasta que nos muramos).